Cuidado de las lentillas
Tabla de contenidos
Limpieza de lentillas: Qué hacer y qué no hacer
Si usas lentillas mensuales o quincenales, es fundamental establecer una rutina de cuidado de las lentillas adecuada y saludable. Es tentador tomar atajos en nuestras ajetreadas vidas, pero un cuidado adecuado de tus lentillas puede ayudarte a prevenir molestias y posibles infecciones oculares. Tu óptico puede darte instrucciones específicas en función de tus ojos y del tipo de lentillas que lleves, pero si necesitas un recordatorio (y todos lo necesitamos, de vez en cuando), aquí tienes nuestros consejos para ayudarte a limpiarlas y cuidarlas.
Pueden parecer obvios, pero aquí tienes nuestros 5 consejos a tener en cuenta a la hora de manipular tus lentillas.
Lávate las manos antes de ponerte y quitarte las lentillas
Aclara y frota suavemente las lentillas con el líquido de limpieza antes y después de usarlas.
Utiliza siempre un estuche adecuado para guardar las lentillas
Renueva el líquido de limpieza diariamente
Compra un bote de líquido de limpieza en formato de viaje para tus desplazamientos o emergencias.
Exponer las lentillas al agua del grifo... ¡nunca!
Tocar la punta del frasco del líquido de limpieza
Utilizar saliva para humedecer las lentillas
Ponerte las lentillas después de maquillarte
Transferir el líquido de limpieza a un bote más pequeño
¿Cómo limpiar correctamente las lentillas?
Frotar suavemente las lentillas con líquido de limpieza es un paso importante.
- Coloca la lentilla en la palma de la mano y frota suavemente con el dedo. Coloca la lentilla en la palma de la mano y frota suavemente con el dedo. De este modo se reduce significativamente la cantidad de depósitos que quedan en la lente tras la desinfección. Existen muchos líquidos multiusos "SIN FROTAR" en el mercado que prometen una desinfección instantánea al contacto, pero las ventajas de frotar las lentillas rápidamente son innegables. Es un hábito fácil de adoptar que puede ayudar a mantener tus lentillas más limpias y claras y tus ojos más sanos.
- No utilices remedios caseros cuando limpies tus lentillas.
- No intentes limpiar las lentillas con vinagre, alcohol, bicarbonato de sodio o cualquier otra sustancia. Utiliza sólo líquidos de limpieza adecuados y de fabricación profesional para tus lentillas.
- Además, no lleve las lentillas más tiempo del prescrito o pasada la fecha de caducidad para evitar molestias o complicaciones de salud potencialmente graves.
Líquidos de lentillas para el cuidado de los ojos
El líquido de lentillas es una parte integral del cuidado de las lentillas, y algunas personas pueden encontrar una marca o tipo más tolerable que otros. Si sientes alguna molestia al ponerte o llevar las lentillas, una opción es cambiar a otro tipo de líquido. Tu óptico siempre puede aconsejarte si desarrollas una pequeña alergia a tu líquido de limpieza actual. Ten en cuenta que ningún líquido puede limpiar completamente o proteger contra infecciones bacterianas como la conjuntivitis. Si sospechas que tus lentillas pueden estar contaminadas, desechalas inmediatamente y consulta a tu oftalmólogo.
Los líquidos multiusos son la opción más popular para la limpieza y almacenamiento. Estos líquidos pueden utilizarse para limpiar, aclarar, desinfectar y conservar todo tipo de lentillas blandas. Normalmente, suelen contener algún agente humectante para aumentar la hidratación, así como trazas de conservantes para mantener la esterilidad y la vida útil. Muchos de estos se promocionan como líquidos "sin frotar", pero la mayoría de los ópticos siguen recomendando incluir este sencillo paso de frotado en la rutina para eliminar tantas impurezas y depósitos de proteínas como sea posible.
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Los líquidos de peróxido de
hidrógeno requieren un poco más de esfuerzo, pero también
proporcionan una desinfección más eficaz..
Estos líquidos
requieren el uso de un estuche especial, que contiene un disco
catalizador. Cuando el líquido de peróxido de hidrógeno entra en contacto con
el disco, se desencadena una reacción química y el peróxido se acaba
neutralizando, reduciéndose a una simple solución salina al final del periodo
de almacenamiento. Sin ser neutralizado, el peróxido de hidrógeno puede causar
mucho dolor e irritación, por lo que es fundamental dejar las lentillas
en remojo durante al menos 6 horas.Más información sobre el uso seguro de líquidos o soluciones
de peróxido. Un beneficio de los líquidos de peróxido es que no
contienen conservantes, gracias a la reacción química. Pregunta a tu
óptico si este método de limpieza es adecuado para ti.
Almacenamiento de lentillas
Un estuche de lentillas limpio y fresco es una parte esencial de tu rutina de cuidado de las lentillas. El estuche debe sustituirse al menos cada tres meses, y conviene enjuagar y limpiar el exterior con regularidad. Utilizar líquido nuevo todos los días y "rellenar o reutilizar" el líquido del día anterior también ayudará a mantener limpio el interior. Alensa ofrece una amplia selección de estuches y kits para lentillas que contienen todo lo necesario para mantener tus lentillas limpias mientras viajas.
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