Aplicación y retirada de las lentillas - Guía paso a paso
Has decidido empezar con lentillas y ahora tienes que aprender a manejarlas. Al principio puede dar miedo, pero con práctica y buenos hábitos, puede resultar fácil y natural. Para ayudarte, aquí tienes nuestra breve guía paso a paso para ponerte las lentillas. ¡Es ideal para principiantes, e incluso puede ser un buen recordatorio para los profesionales!
Cómo ponerme las lentillas
Debes saber que al ponerte la lentilla tienes que tocar el propio globo ocular, la lentilla no se pega sola. Deja que la lente se adhiera ligeramente a tu ojo y tus párpados harán el resto. Veamos ahora cómo hacerlo.
Paso 1
Empieza por preparar todo lo esencial en una habitación bien iluminada. Necesitarás las lentillas, el líquido, un espejo y un lugar donde lavarte y secarte las manos con una toalla limpia. Recuerda ponerte las lentillas antes de maquillarte.
Paso 2
Lávate siempre bien las manos para evitar que la suciedad y las bacterias entren en contacto con las lentillas. Utiliza jabón suave o antibacteriano, evita los jabones hidratantes, las lociones y los productos a base de aceite. Después de lavarlas, sécate las manos con una toalla. Evita utilizar toallas de papel, que pueden dejar pelusas en las manos. Ten en cuenta que es mejor mantener las uñas cortas al manipular las lentillas para no dañarlas ni la córnea del ojo.
Paso 3
El siguiente paso es sacar las lentillas del estuche o de un blíster nuevo. Si tienes una graduación distinta para cada ojo, te resultará útil establecer un hábito y colocarte siempre primero la lentilla izquierda, por ejemplo, para no confundirlas. Coloca la primera lente en la palma de la mano, humedécela con el líquido y frótala suavemente con el dedo. Algunas marcas ofrecen líquidos "no-rub", pero la mayoría de los contactólogos coinciden en que siempre es una buena idea frotar suavemente las lentillas para conseguir un mayor poder de limpieza. Si quieres que el manejo de tus lentillas sea más sencillo, te ofrecemos una gran variedad de herramientas prácticas para hacerlo más fácil. Los aplicadores y las pinzas para lentillas facilitan su manipulación.
Paso 4
Coloca la lentilla en tu dedo índice. Si la lente parece un cuenco, lo estás haciendo bien. Pero si los bordes apuntan hacia fuera, la lentilla está al revés. Puede ser difícil de saber, pero la mayoría de las lentillas tienen una pequeña marca (letras o números) para que puedas ver fácilmente si la lentilla está al revés o no.
Paso 5
Con la lente apoyada en el dedo índice, tira del párpado inferior hacia abajo con el dedo corazón y del párpado superior hacia arriba con la otra mano. Cuanto más abras el párpado, mejor se adaptará la lentilla a la córnea. No puedes parpadear si sujetas las pestañas correctamente. A algunas personas les resulta útil mirar hacia arriba para evitar parpadeos indeseados. Al principio puede resultar difícil, ¡pero te acostumbrarás con la práctica!
Paso 6
Coloca la lentilla sobre el ojo, en cuanto toques el ojo, retira lentamente el dedo y con mucho cuidado (despacio) suelta primero el párpado inferior y luego el superior. Mantén el ojo cerrado y no parpadees, toca ligeramente el párpado superior cerrado con el dedo y "mira" hacia los lados. De este modo, eliminará las burbujas de aire que se han formado bajo la lentilla. Esto permite que la lente se asiente en el lugar correcto de la córnea. Si esta se irrita el ojo o sientes alguna molestia, quítatela y límpiala suavemente con un poco de líquido antes de volver a colocarla en el ojo.
Cómo quitarme las lentillas
Antes de empezar, lávate las manos como antes de ponértelas. Si llevas maquillaje, asegúrate de quitarte las lentillas antes de lavarte la cara. También debes preparar todo lo que vayas a necesitar en una habitación limpia y bien iluminada. Asegúrate de tener a mano el estuche de las lentillas, el líquido, el espejo y cualquier otro accesorio que puedas necesitar. Si viajas, puedes encontrar todos estos artículos en un práctico kit de lentillas.
Paso 1
Empieza por humedecer los ojos con gotas o sprays oculares. Esto puede ayudar a humedecer las lentillas y facilitar su retirada. Una o dos gotas en cada ojo deberían ser suficientes, y pueden hacer que el proceso sea más fácil y cómodo, sobre todo si tienes sequedad ocular crónica , o notas que se te secan más al final del día.
Paso 2
Mantén los párpados superior e inferior como lo harías para colocar las lentillas. Mientras mira al frente, sujeta la lentilla por los lados (desde la nariz y la esquina exterior) con los dedos índice y pulgar y aprieta suavemente (como si pellizcaras). No te precipites y realiza este paso con calma y despacio.
Paso 3
Aprieta suavemente la lentilla con los dedos índice y pulgar, y colócala en el estuche con líquido para lentillas nuevo. El estuche debe llenarse con una solución nueva, aproximadamente hasta la mitad del vaso. No diluir la solución con agua. Si ya ha transcurrido el periodo durante el cual se pueden usar las lentillas, tiralas. No olvides mantener limpio el estuche de las lentillas y sustituirlo por uno nuevo cada vez que abras un nuevo envase de líquido, o al menos una vez al mes.
Paso 4
Ahora vuelve a repetir el proceso utilizando la misma mano con el otro ojo, paso a paso como lo hiciste con el primer ojo. Enhorabuena: ¡te has quitado y guardado las lentillas con éxito! Con la práctica y un mantenimiento adecuado, ponerte y quitarte las lentillas se convertirá en una parte rápida y fácil de tu rutina diaria.
Sigue estos pasos cuidadosamente para ayudar a mantener una salud ocular, comodidad y calidad de visión óptimas. Tus ojos y tus lentillas te lo agradecerán.
